
Si en tu ferretería vendes productos como thinner, aguarrás o removedor de pintura, este blog te va a caer como anillo al dedo. Y no, no es que queramos meterte miedo, pero vender solventes en México no es cosa de nomás ponerlos en el estante y ya. Estos productos están clasificados como materiales peligrosos y su venta está regulada por distintas autoridades. Para venderlos con todas las de la ley se necesita una combinación de permisos a nivel federal, estatal y municipal, además de cumplir con normativas específicas para el manejo de sustancias químicas peligrosas.
Vamos por partes, como buen ferretero organizadito:
Los solventes más comunes son el aguarrás, thinner, acetona, tolueno y xileno, entre otros. Todos estos comparten algo: son inflamables, emiten vapores tóxicos y, si se manejan mal, pueden ser un peligro para la salud y el medio ambiente.
Por eso, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) y la Secretaría de Salud regulan su almacenamiento, transporte y venta. Además, la COFEPRIS puede realizar inspecciones si sospecha que tu negocio no cumple con las normas.
Dependiendo del volumen que manejes, podrías necesitar uno o varios de estos permisos:
Te cuento algo: hay municipios donde la PROFEPA y Protección Civil hacen inspecciones sorpresa. Si encuentran irregularidades, las multas pueden ir desde los 50 mil hasta los 500 mil pesos o incluso el cierre temporal del local. Y no quieres que te clausuren justo el fin de semana de quincena, ¿verdad?
Si apenas estás empezando a vender este tipo de productos, asesórate con un proveedor formal que también cumpla con las normas. Así garantizas que el producto viene con su hoja de seguridad (MSDS) y su respaldo legal.
Vender solventes en México no es imposible, pero requiere responsabilidad. Al final, se trata de proteger tu negocio, a tus clientes y a tu equipo. Recuerda: una ferretería ordenada y bien regulada vende más y duerme tranquila.